El 70% del cuerpo humano es agua, por eso tiene todo el sentido del mundo decir que los líquidos (especialmente el agua) son muy importantes para encontrar el equilibrio entre el cuerpo y la salud. Tu cuerpo puede sufrir de deshidratación muy rápidamente, y como nos preocupa tu salud y queremos que aprendas a cuidarte, ¡te ayudaremos a prevenirlo!
Aquí hay 6 signos que muestran que tu cuerpo se está deshidratando y necesita agua lo antes posible.
Tu «pipí» tiene un color oscuro
El primer signo de deshidratación es tener la orina de un color amarillo oscuro. Normalmente sucede cuando disminuye la presión de la sangre y los riñones intentan almacenar agua en lugar de expulsarla del cuerpo.
Ten en cuenta que el color de la orina puede cambiar por muchas razones, pero la más habitual es por la deshidratación.
Tienes la piel seca
El agua es esencial para una piel hidratada y radiante y cuando no bebes suficiente agua, tu cuerpo la tiene que gastar para las funciones básicas y tu piel se reseca. Como sabemos, una piel seca no es agradable a la vista. ni al tacto, así que a beber tanta agua como puedas.
No tienes energía y te sientes cansada
Cuando estamos hidratadas adecuadamente, el agua mantiene la cantidad apropiada de sangre en los vasos sanguíneos y regula la presión de ésta. Cuando nos deshidratamos, tanto el volumen como la presión de la sangre pueden disminuir. Y sin un nivel de oxígeno adecuado, nuestros músculos y nervios dejan de funcionar poco a poco y te sientes muy cansada.
Te mareas a menudo
Normalmente cuando tienes la presión baja te mareas cuando te levantas rápido de la silla. Si el cuerpo está durante mucho tiempo sin agua, puedes padecer confusión y mareos, incluso puedes sentir que te cuesta recuperar el aliento.
Tienes calambre musculares
La hidratación es vital para la contracción de tus músculos y cuando tu cuerpo no tiene suficiente agua almacenada puedes llegar a tener algún calambre (los más habituales son los de los gemelos o en las plantas de los pies). Ambos pueden ser muy dolorosos, pero la hidratación puede ayudar a aliviar el dolor y prevenir los calambres.
Comerías a todas horas
Si dejas de beber hasta que tengas sed, puedes deshidratarte antes de realmente tener sed. Es posible que sientas hambre cuando estés deshidratado, lo que explica por qué un solo vaso de agua puede acabar con la sensación de hambre durante toda la noche.
Sin embargo, la sensación de sequedad y espesor en la boca puede ser una señal de deshidratación.
Por eso, ¡levántate y bebe un vaso de agua!